viernes, 28 de noviembre de 2008

2005

2005 fue mi segundo amor, la reinvención de misma, a través de libros y un diario que llevé por mucho, y mi descubrimiento de los poetas. Cuando me enseñaron a analizar poesía creía que escribirla era lo más complicando del mundo. Yo, que me pasaba la vida inventando cancioncitas, no me había dado cuenta aún de que en realidad llevaba la poesía impresa en mí. Y es muy raro que hubiera tardado tanto en exteriorizarlo, pero en cuanto lo hice, triunfé. Era la suerte del principiante, pero eso es otra historia. Se podría decir que casi todas estas rimas pasaron antes por papeles (los primeros que encontraba por el camino) que por teclas.

Septiembre me trajo una tristeza que se alargó por mucho tiempo, y que sólo logre canalizar con la poesía. Desde ahí pocos poemas son alegres y son más de tecleo.

De aquí para arriba, sed bienvenidos, al año con rima fea.

No hay comentarios:

Creative Commons License
Sólo puedes extraer información si citas el sitio (con enlace) como fuente de origen del material.